Seguro que lo has escuchado alguna vez: “Podemos rapar a nuestra mascota para que esté más fresca durante los meses de más calor”. Pero, ¿sabes realmente los riesgos que entraña para la salud de nuestro peludo?
Como seres humanos es lógico pensar que cuanto más pelo tengamos, más calor vamos a pasar. Sin embargo, los caminos evolutivos para el homo sapiens sapiens y el canis lupus familiaris son totalmente diferentes en cuanto a aspectos físicos y orgánicos/biológicos.
¿Cuál es la funcionalidad del pelo en nuestras mascotas?
Dentro de las múltiples funciones que tienen tanto la piel como el pelo, destacamos estas cuatro como principales:
- Les protege frente a agentes externos y agresiones mecánicas, como por ejemplo, la protección frente a traumatismos. También les protege del agua, la luz y los rayos UV, la temperatura extrema y microorganismos.
- El manto posee una función de termorregulación vital: la grasa subcutánea y el pelaje espeso protegen al animal del frío. Nuestros perros y gatos son capaces de erizar el pelo. De esta manera, amplían la cámara de aire que hay entre el pelo y pueden refrescarse.
- Identificación y camuflaje del individuo: el pelo juega un papel fundamental a la hora de relacionarse con otros perros, ya que emiten señales constantemente.
- La piel y el manto también les ayuda a la regulación sistémica de la presión sanguínea.
Como puedes comprobar el pelo no es sólo una cuestión meramente estética, sino que tiene un papel fundamental en la salud, ya no sólo dermatológica sino también general de todo el organismo.
Así, te planeamos 5 razones por las que no deberías rapar a tu perro o gato:
- Queda totalmente desprotegido frente a agresiones externas, desde la picadura de una pulga o garrapata, hasta la radiación de los rayos UV, pudiendo llegar a aparecer en algún casos cáncer de piel.
- Si se produce algún traumatismo o lesión, las fibras de colágeno del pelo proporcionan a la piel una buena resistencia a la tracción y las fibras elásticas permiten que recupere su posición inicial. Es decir, el pelo para tu mascota es su airbag. Si él, estará complemente desprotegido frente a este tipo de lesiones, que pueden producirse en un ámbito tan rutinario como el jugar en casa o en el parque.
- El rapado continuado provoca cierto tipo de lesiones en la piel, así como la aparición de prurito (picor), eritema (rojeces con o sin inflamación) y cierto tipo de dermatitis.
- Pierde una importante herramienta de comunicación frente a otros perros o gatos, ya que utilizan su pelaje para emitir señales, como por ejemplo, el erizamiento en zonas localizadas de la cola, el cuello o la línea de la espalda.
La quinta razón por la que no debes de rapar a tu perro es quizás la más importante de todas. Como hemos visto anteriormente, el pelo cumple una función de termorregulación, por tanto, al eliminarlo lo que estaremos provocando será un aumento de la temperatura en su organismo. El pelo le protege tanto del frío como del calor extremo.
¿Cómo podemos refrescar a nuestra mascota en los meses de más calor?
Un punto a tener en cuenta es evitar realizar actividades en el exterior siempre en las horas de mayor incidencia solar, es decir, entre las doce de la mañana y las seis de la tarde. También podemos refrescar al animal en casa con alguna piscina, agua fresca siempre a su disposición y snacks naturales que puedan refrigerarse.
Sin embargo, el pelo y el manto, vuelve a ser el principal aliado para ayudarnos a refrescar nuestra mascota. El cepillado y deslanado son claves para que nuestro perro pueda realizar la función de termorregulación correctamente.
Así que si quieres ayudar a tu mascota a sentirse más fresco y cómodo, un buen cepillado diario será uno de los mejores hábitos que puedes incorporar en vuestra rutina.
Por último, te aconsejamos que el hábito del cepillado sea agradable y placentero para tu peludo. Es una rutina que si hemos incorporado desde pequeños será fácil de manejar. Si has empezado más tarde o quieres incorporarla ahora, puedes utilizar snacks naturales mientras lo cepillas, así como productos que ayuden al desenredo y limpieza de forma más fácil.
Los nudos son complicados de eliminar, sobre todo sino se cepilla con asiduidad o nuestra mascota tiene el pelo muy fino. Por ello, para hacer más agradable y sin sufrir tirones de pelo y nudos innecesarios, te aconsejamos utilizar un producto que además de desenredar, tenga función limpiadora de la fibra capilar, como nuestro Limpiador diario Stop Toallitas, 100% natural y con certificación ecológica. Sus aceites han sido especialmente escogidos, respetando su pirámide olfativa aromática, por tanto no contiene aromas que resulten desagradables para nuestras mascotas.